Acompañado por su esposa Peng Liyuan y el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, el presidente chino Xi Jinping llegó a Hong Kong. Es su primer viaje fuera de China continental desde el inicio de la pandemia de covid-19 en diciembre de 2019.

El Deber logo
30 de junio de 2022, 7:58 AM
30 de junio de 2022, 7:58 AM

El presidente chino Xi Jinping aseguró que Hong Kong "renació del fuego" a su llegada este jueves para asistir a las celebraciones del 25º aniversario del retorno de esta antigua colonia británica al poder comunista de Pekín.

Con Nerea Hernández, corresponsal de RFI en Pekín 

"En el último período, Hong Kong ha experimentado más de una prueba seria, y ha superado más de un riesgo y desafío. Después de las tormentas, Hong Kong renació del fuego y emergió con una vigorosa vitalidad", dijo Xi, en su primera visita a este territorio desde que fue aplastado un movimiento prodemocracia.

"Los hechos han demostrado que el principio 'Un país, dos sistemas' está lleno de vitalidad", aseguró Xi, quien también hace su primer viaje fuera de China continental desde el inicio de la pandemia de covid-19 en diciembre de 2019.

 Acompañado por su esposa Peng Liyuan y el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, Xi, quien llegó en tren de gran velocidad, fue recibido en la estación por escolares con banderas y flores, bailarines vestidos de leones y algunos medios de comunicación acreditados.

Una visita controvertida

Esta visita es histórica y controvertida por varios motivos. Por un lado, es la primera vez que el presidente chino sale fuera de la parte continental de China desde que comenzase la pandemia. Y lo hace a pesar de que Hong Kong atraviesa ahora una nueva ola de infecciones de COVID-19. Por este motivo, la visita se realiza en un “circuito cerrado”, que obliga a mantener cuarentenas previas a funcionarios, voluntarios y participantes en los eventos.

En segundo lugar, esta visita acontece tras la implementación de la polémica Ley de Seguridad que persigue cualquier movimiento opositor al principio de Una sola China. Una limpieza política que ha puesto en el gobierno regional a los “patriotas”. Desde hace unos meses funciona un nuevo Consejo Legislativo y ahora, la región contará con un nuevo jefe fiel a Pekín.

En tercer lugar, se acerca el XX Congreso Nacional donde Xi espera ser reelegido y consolidar su poder. Su visita a Hong Kong tras años de revueltas y fuertes oposiciones es una demostración de que Pekín controla Hong Kong, al tiempo que demuestra que la región puede transitar del caos a la gobernabilidad, aunque en medio se queden libertades y democracia.

La Liga de los Socialdemócratas, uno de los pocos grupos opositores que quedan en Hong Kong, informaron que no se manifestarán el 1 de julio después de una visita de agentes de seguridad nacional a voluntarios asociados a la entidad.

Y el principal instituto demoscópico de la ciudad anunció que iba a retrasar una encuesta sobre la popularidad del gobierno "en respuesta a las sugerencias de relevantes departamentos gubernamentales tras la evaluación del riesgo".

Tradicionalmente, el aniversario de la retrocesión del 1 de julio de 1997 ha estado marcado por manifestaciones pacíficas de decenas de miles de personas.

Pero las congregaciones masivas han desaparecido de Hong Kong en los últimos años por una mezcla de las restricciones sanitarias por el coronavirus y la represión orquestada por las autoridades locales y Pekín para acallar cualquier oposición pública al poder comunista.

Este recorte democrático es la falta de libertad de prensa que denuncian medios locales e internacionales, como AFP y Reuters. Estrictos requisitos antipandemia y listas de reporteros no autorizados dejan la cobertura mediática de esta visita en manos de medios oficiales.

En medio de fuertes turbulencias en el panorama internacional, China parece entretenida en mantener su propio territorio bajo control, al tiempo que fuera otros parecen situarla en el nuevo contexto mundial del lado de Rusia. Desde luego, son tiempos peligrosos.