En su discurso promete “gobernar para todos”. La presidenta Jeanine Áñez fue la única de los opositores al MAS, que lo felicitó. Mesa y Camacho se mantienen en silencio y, a través de sus voceros, dicen que esperan los datos oficiales

19 de octubre de 2020, 7:44 AM
19 de octubre de 2020, 7:44 AM

El candidato del MAS, Luis Arce, Catacora, después de la medianoche se declaró vencedor de los comicios nacional una vez se hicieron públicos los resultados no oficiales del conteo rápido que realizó la empresa Ciesmori para Unitel y Bolivisión. Prometió que gobernará para todos “corrigiendo los errores” y no mencionó al expresidente Evo Morales en su discurso. Arce manifestó que los bolivianos el domingo dieron en las urnas “pasos importantes, recuperamos la democracia y la esperanza”.

Describió la elección como una jornada “pacífica y tranquila, en la que gran parte de los bolivianos nos apoyaron. Marca que el pueblo quiere retomar la ruta que dejamos antes del golpe”. Manifestó el compromiso de trabajar, “de llevar adelante nuestro programa, como lo vinimos diciendo, vamos a trabajar para todos los bolivianos, vamos a construir la unidad en el país”, prometió el candidato presidencial del MAS. Arce, manifestó que con su victoria se abandonó “la incertidumbre que vivieron las familias bolivianas en estos 11 meses”, en medio de un discurso en el que no mencionó el nombre de Morales.

“Vamos a aprender y superar nuestros errores. Agradecemos a toda nuestra militancia. La campaña que compartimos con las organizaciones sociales”, apuntó el exministro de Economía y dijo que los líderes sociales fueron los grandes artífices de la victoria. 

El pueblo es sabio, tenemos la obligación de trabajar para responder a todas las esperanzas que el pueblo pone en nosotros. Como dice la canción, ‘Para el pueblo lo que es del pueblo’”, aseveró el candidato que tiene la preferencia nacional, según los datos no oficiales difundidos por Ciesmori.

La tensión

Desde el final de la tarde del domingo, los candidatos por el MAS, Luis Arce y David Choquehuanca, se reunieron alejados del centro del poder político del país, la plaza Murillo. Como lo había anunciado Arce, él y Choquehuanca esperaron los resultados en una sobria casa de campaña, ubicada en la avenida Ecuador, en la zona de Sopocachi. 

El salón del sitio no tiene el espacio suficiente para albergar ni a 30 personas, y afuera habían más de 150 periodistas y camarógrafos de medios nacionales y extranjeros que esperaban la reacción del binomio masista. 

La logística de campaña definió utilizar un balcón de la vieja construcción para instalar la amplificación y un par de pantallas con fotos de los candidatos. Sopocachi es un barrio en el que han proliferado los edificios familiares. Cuando los parlantes empezaron a sonar con canciones del MAS, los vecinos comenzaron a salir a las ventanas y a insultar al binomio.

Sonaban bubuzelas, cacerolas, insultos y cánticos en contra del partido de Evo Morales. Los vecinos dejaron sus ventanas y empezaron a acercarse. Eran casi las 20:30. El vocero del MAS, Sebastián Michel, salió de la casa de campaña y advirtió que esperarían los resultados y se manejarían con mucha prudencia.

Mientras declaraba la tensión aumentó en el lugar y el dirigente tuvo que subir apresuradamente a su vehículo, para cumplir con un compromiso que tenía en un medio televisivo. Algunos vecinos se acercaban. Poco antes de las 21:00 llegó con sirenas y motos un contingente de la Utop, que desalojó a todas las personas que no portaban credencial que acredite su representación de algún medio de comunicación. Los parlantes dejaron de funcionar, las dos pantallas led fueron apagadas. 

El tiempo pasaba, los efectivos sacaron a todos los particulares y cerraron las calles Aspiazu y Guachalla.

A las 21:30 otra de las voceras del MAS, Marianela Paco, salió al balcón y pidió a los periodistas un poco más de paciencia. Aseguró que apenas los medios difundan la encuesta con los resultados del conteo rápido, Arce y Choquehuanca saldrían a pronunciarse. 

El tiempo pasaba y la espera se hacía larga. Las luces de los edificios comenzaron a apagarse, mientras los periodistas aguardaban, soportaban el frío y el silencio reinaba en medio de la denominada “tensa espera”, como describieron algunos reporteros el momento que se vivía. 

A las 23:30, en una declaración, el vocero masista Sebastián Michel conminó a las encuestadoras a “decir la verdad” y a darle la certidumbre al pueblo, “porque el MAS ganó ampliamente en las elecciones”. Ciesmori salió con la encuesta de conteo rápido poco después de la medianoche.

En el interior de la casa de campaña del MAS estalló el sonoro festejo. Ahí adentro estaban reunidos los candidatos, la presidenta del Senado, el abogado Wilfredo Chávez y los miembros del Pacto de Unidad. Por la hora, la cantidad de periodistas se había reducido, así que se abrieron las puertas. El balcón de la vieja casona de Sopocachi no fue utilizado, tampoco los parlantes ni las pantallas led se volvieron a encender.

Arce y Choquehuanca aparecieron. El ganador de los comicios, de acuerdo con el conteo rápido, dio un discurso conciliador sin mencionar al líder histórico del MAS. Poco después, la encuesta de Jubileo, ratificó la tendencia.