A pesar de que se les adjudica la capacidad de hablar, lo que hacen es imitar la voz humana. Una característica que ha intrigado a los investigadores durante muchos años

12 de octubre de 2020, 8:27 AM
12 de octubre de 2020, 8:27 AM

Cinco loros de un zoológico de Reino Unido días atrás se hicieron populares en todo el mundo tras el anuncio de que fueron retirados por insultar a los visitantes.

El Lincolnshire Wildlife Park tomó la decisión de retirar a los cinco loros grises africanos (Psittacus erithacus) que fueron donados por distintos propietarios, luego de que se dieron cuenta que insultaban a todas las personas que pasaban cerca. Lo que al principio parecía divertido se convirtió en un problema para la institución que decidió cambiarlos de lugar.

¿Por qué y cómo es que estas aves tienen esa capacidad de imitar los sonidos de los humanos?

Lo primero que hay que aclarar es que los loros no hablan, como muchas personas dicen, lo que tienen es la capacidad de vocalizar. En realidad, lo que hacen es repetir los sonidos que escuchan continuamente y eso pasa solo con los que han sido criados desde pichones en una casa o entre humanos. No ocurre lo mismo con los que viven en la naturaleza. Seguramente los loros de la historia del zoológico de Reino Unido estaban acostumbrados a escuchar esos insultos y por eso los repetían”, explica Abraham Rojas biólogo especialista en psitácidos (familia de aves de la que forman parte los loros, cotorras y guacamayos)

La capacidad de reproducir la voz humana ha sido un tema que ha sido de interés de muchos investigadores y si en un principio se creía que estaba vinculado al tamaño del cerebro de estas aves, pero investigaciones más recientes atribuyen a ciertas estructura cerebral desarrollada millones de años atrás.

Rojas comenta que este tipo de aves en estado silvestre no remedan sonidos de la selva ni de otros animales, porque se crían con otros similares a ellos en pareja o en bandadas grandes y crecen escuchando su propio lenguaje. Solo los que viven en cautiverio y desde que son pichones imitan los sonidos de la casa para comunicarse. 

“Son muy comunicativos, son monógamos y cuando se crían en una casa y tienen una madurez sexual se ‘improntan’ (periodo en el que el animal aprende a dirigir su respuesta social hacia un objeto concreto, normalmente alguno de los padres) hacía una persona de la familia, que puede ser el que le da de comer o si se cría con otro loro, por más de que no sea de su especie lo adopta como su pareja”, cuenta el biólogo.

Rojas, que es también el encargado de la Escuela Ambiental del Zoológico Municipal, indica que no todos los loros o parabas tienen la misma capacidad para imitar la voz humana, las que mayor facilidad tienen en nuestra región son el loro galano hablador ( Amazona aestiva) la lora amazónica (Amazona amazonica), el loro cenizo (Amazona farinosa), mientras que los guacamayos o los Ara hablan poco.

En España una de las especies consideradas más ‘habladora’ es la conocida como loro boliviano (Aratinga mitrata), que es endémica también en Perú y Argentina y que fue introducida en Europa de forma ilegal.

En Bolivia existen 52 especies de este tipo de aves y tres de ellas son endémicas y actualmente en peligro de extinción se encuentran la paraba barba azul y la frente roja, especies que se siguen comercializando de manera clandestina. Vale la pena indicar que en el Zoológico Municipal se pueden apreciar 14 especies.