Los descendientes de Tomás (padre), Marcelo y Tomás (hijo) Callaú quieren que el legado creativo de sus parientes perdure y que sea conocido por la gente. El museo de la Ballivián es parte del proyecto

El Deber logo
20 de enero de 2021, 15:48 PM
20 de enero de 2021, 15:48 PM

En la esquina de las calles Ballivián y Cobija, en pleno centro de Santa Cruz de la Sierra existe una casona, que atesora valiosas piezas de arte elaboradas en madera. Pasar por ese sitio y mirar sus vidrieras es un verdadero deleite; se exhiben esculturas y objetos como sillas y lámparas.

Se trata de la casa de la familia Callaú, donde durante muchos años fue el taller de carpintería de Tomás Callaú Callaú, uno de los trabajadores de la madera más prestigiosos de Santa Cruz, y donde se iniciaron en su aventura artística dos grandes de la plástica nacional, Marcelo y su hermano Tomás Callaú Campos.

De los descendientes de los Callaú, cuatro mujeres, dos están relacionadas con la cultura, Marbella que es arquitecta y que elabora obras de arte en madera, y su hermana Nadia Callaú, que es gestora cultural, las dos son hijas de Tomás.

Ambas manejan el proyecto para crear una fundación que promueva las artes plásticas. Junto al centro cultural, planean consolidar el Museo Callaú, en el que se exhiban las maquetas y las piezas de madera que crearon los Callaú.

Lamentablemente, la pandemia del coronavirus paró el avance del proyecto, que será retomado cuando la situación mejore.

Con olor a madera

Los Callaú tenemos el corazón de madera, nuestros cuerpos lo forman los árboles y nuestra sangre tiene savia de las plantas“, dice Marbella, haciendo referencia de que la vida de su familia gira en torno al arte forestal.

Cuenta que ella se crio entre tablones de madera, aserrín y diseños de muebles.

En la casona de la calle Ballivián sigue funcionando la carpintería, a la que han denominado Made in Callaú, porque todo lo que se crea ahí tiene el sello de su familia.

Aclara que la madera con la que trabajan es certificada para el aprovechamiento forestal y proviene de los bosques cruceños.

Para ella, la madera es más que materia prima para sus trabajos; es el elemento que les permite dar rienda suelta a su creatividad.

Sala de exposición en la vieja casona de la familia Callaú, que está llamada a convertirse en un museo