Los acusan de negociar con el MAS por cargos en el Legislativo. Luis Fernando Camacho pide perdón al pueblo. Uno de ellos es Runny Callaú. Él se defiende

29 de enero de 2021, 14:58 PM
29 de enero de 2021, 14:58 PM

La agrupación política Creemos hizo pública su crisis interna en la Asamblea Legislativa Plurinacional. Cuatro de sus miembros en la Cámara de Diputados fueron acusados de transfuguismo y desconocidos como representantes de la bancada opositora por negociar con el MAS un espacio en la comisión de Ética. La dirigencia presentó ayer un recurso ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para recuperar los curules que ocupan los ahora denominados traidores de Santa Cruz, en un intento por impedir que los masistas se aproximen a los dos tercios de los votos en la Cámara Baja.

Los diputados Sandra Paz, Runny Callú, Tito Caero y Omar Rueda fueron expulsados de la bancada de Creemos. “Esta denuncia la hacemos tras reiteradas acciones de los mencionados diputados que, en busca de beneficios personales, actúan al margen de las decisiones asumidas por la bancada y son funcionales al MAS, al asegurarse espacios en la cuarta secretaría y la comisión de Ética con votos del MAS”, expresó el jefe de bancada de Creemos en la Cámara Baja, Erwin Bazán, que estuvo acompañado por otros ocho diputados durante la conferencia de prensa que ofreció en Santa Cruz.

Bazán explicó que los cuatro legisladores desconocieron un acuerdo interno que posibilitó, el 22 de diciembre del año pasado, presentar oficialmente a dos postulantes para la comisión de Ética de Diputados. Sin embargo, Sandra Paz, que el 5 de noviembre de 2020 pactó con el MAS para ocupar la cuarta secretaría de la Cámara, entregó otra carta la semana pasada a los masistas para que su colega Omar Rueda, diputado elegido en el Plan Tres Mil, asumiera el lugar reservado para las minorías en la comisión de Ética. La propuesta contó con el respaldo de Callaú y de Caero.

Creemos solicitó al TSE la aplicación del artículo 39 de la Ley de Organizaciones Políticas, que establece que todo espacio de representación electivo corresponde a la organización política que lo ganó en elecciones, sola o en alianza. La ley exceptúa a los correspondientes a naciones y pueblos indígenas, originarios, campesinos elegidos de forma directa.

La división en la bancada de Creemos provocó que su líder y candidato a la Gobernación cruceña, Luis Fernando Camacho, pidiera disculpas al pueblo por elegir a unos candidatos que traicionaron los principios de la región. “Lamentablemente (estas personas) no han respondido a los intereses de Santa Cruz, han negociado los principios, han hecho alianza con el MAS y pedimos perdón al pueblo”, expresó Camacho.

El líder de Creemos identificó a Sandra Paz como militante de UCS, que formó parte de la lista de candidatos por la alianza Creemos, por el acuerdo que suscribió con Jhonny Fernández para las elecciones nacionales de 2020.

Por causa de la división, la bancada de diputados de Creemos se reduce de 16 a 12 miembros, mientras que el MAS se aproxima a los dos tercios. De los 130 diputados, la bancada masista contaba con 73, ahora suma otros cuatro posibles votos que los acerca a los 86 que se requieren para los dos tercios.

Callaú se defiende

Consultado, desde La Paz el diputado Runny Callaú afirmó que no tienen sustento las acusaciones en su contra. Anunció que analizará las denuncias en su contra y para hoy (viernes) ofrecerá una conferencia de prensa para emitir una respuesta formal. Callaú se pronunció a través de Facebook. Escribió: “Vulneraron nuestros derechos y por manifestar nuestra voz nos llamaron traidores y vendidos, no se le hace eso (a) sus mejores soldados”.

El rescatista aseguró que la “frase que repetimos tantas veces en campaña ‘tu voz al poder’ entró profundo en el pecho y se convirtió en promesa para mi pueblo, al igual que el salvar vidas. Esa frase se nos quiso vulnerar a cuatro diputados de la alianza Creemos. Fuimos atropellados en nuestro derecho constitucional de participar de un consenso con nuestra propia bancada para elegir nuestra directiva, comité y comisiones, por el contrario, se nos presentó una lista ‘sugerida’ donde ya estaba todo designado”, denunció Callaú.

El diputado afirmó que quedar fuera no fue el problema para ninguno de los ahora expulsados de Creemos, sino que resultaron afectados por la discriminación y la falta de respeto de no haber sido tomados en cuenta para llegar a un consenso en la bancada.

Además, explicó que las diferencias internas existen desde octubre y noviembre del año pasado, con las postulaciones a la cuarta Secretaría de la Cámara de Diputados, que ahora ocupa Sandra Paz, y en la presidencia de la Brigada Parlamentaria Cruceña, que está en manos del diputado José Carlos Gutiérrez.

“Sentí dolor en mi corazón al ver a don Tito (Caero) una persona adulta mayor lastimada en su dignidad, exigiendo que le demuestren pruebas de ser vendido. También fue doloroso ver a Sandra (Paz) con el llanto contenido, siendo atacada por las redes con tanta ira de quienes, antes de investigar, juzgan a la primera acusación y tiran piedras sin piedad, hiriendo a quien no se lo merece”, escribió Callaú en Facebook.

Sobre la distribución de espacios, el diputado Bazán explicó que la bancada de Creemos estaba conformada por 16 diputados y hay solo cuatro cargos para la oposición. “En cinco años de gestión parlamentaria había lugar para todos, pero ellos no entendieron esa postura porque antepusieron sus intereses particulares”, afirmó.