El diferimiento de pagos será por los meses de marzo, abril y mayo. Asoban indicó que las entidades financieras, internamente, están adoptando medidas para apoyar a sus prestatarios con créditos vigentes al 29 de febrero.

8 de abril de 2020, 18:08 PM
8 de abril de 2020, 18:08 PM

Por los próximos tres meses, las entidades financieras del país postergarán la recepción de $us 1.800 millones por concepto de créditos. El aplazamiento de pagos fue una de las medidas adoptadas por el Gobierno, dentro del paquete económico, para amortiguar el impacto que genera la cuarentena que se cumple desde el 22 de marzo, por la presencia del coronavirus.

Desde esa fecha el Gobierno ordenó la paralización de todas las actividades económicas, salvo las más indispensables; como la producción de alimentos e implementos médicos y de limpieza. Esta situación dejó en jaque a varias empresas y sobretodo a las personas que tienen préstamos y no pueden trabajar.

Por eso, para mitigar el impacto de la medida tomada dentro de la emergencia sanitaria que vive el país, el Estado dispuso aplazar el pago de los créditos.

La Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) reveló a EL DEBER que a la fecha todos los bancos han diferido, de manera automática, el pago de cuotas por los meses de marzo, abril y mayo; para todos los créditos que se encontraban vigentes, de acuerdo al manual de cuentas para las entidades financieras, al 29 de febrero de 2020.

“A su vez, dentro de los seis meses posteriores al último diferimiento, los clientes podrán convenir con el banco sobre los términos de pago de las cuotas diferidas”, agregó Nelson Villalobos, secretario de ejecutivo de Asoban.

Con relación al monto diferido por las cuotas por los tres meses, Villalobos reveló que se situará en torno a los $us 1.800 millones para el sistema en su conjunto.

Empero el monto dependerá del plazo de cada crédito, lo cual se relaciona con el tipo de préstamos y otras condiciones. Por ejemplo, explicó el ejecutivo, un crédito hipotecario cuenta con un plazo mayor al de un microcrédito, o créditos otorgados para capital de operación cuya duración es menor. 

“Por tanto, la rotación de cartera difiere entre los nichos de negocio que son atendidos por las entidades bancarias”, dijo.

Otras medidas

Villalobos señaló que el diferimiento es sólo una de las medidas adoptadas por los bancos, que internamente las entidades están realizando gestiones que permitan prestar los servicios a la población de la forma más adecuada posible, en el marco de lo dispuesto por el Gobierno, precautelando la seguridad de sus funcionarios y de la población en su conjunto.

Las entidades bancarias manifestaron su entera predisposición a colaborar en aquellos casos en los que se observe deterioro en la capacidad de cumplimiento de las obligaciones contraídas, por ello es que se implementó el diferimiento y se dispuso de otros mecanismos que puedan ayudar a los prestatarios que efectivamente lo requieran para lo cual las entidades cuentan con mecanismos de análisis y políticas adecuadas”, afirmó Villalobos.   

Desde la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco) confirmaron que los bancos presentaron propuestas, dentro de sus propias políticas, para facilitar créditos para el pago de planillas.

“Es importante que cada empresa se ponga en contacto con su entidad financiera para poder tener más detalles al respecto”, indicó Fernando Hurtado, presidente de la Cainco.

Reprogramaciones

Con relación a las reprogramaciones, desde Asoban, indicaron que están siendo analizadas caso por caso en los bancos y su registro se observará en los próximos meses.

Al mes de febrero la cartera vigente reprogramada, según Asoban, ascendió a $us 838 millones, denotando un importante crecimiento en relación a doce meses atrás.

“Esto se explica por la crisis política y social que atravesó el país en los meses de octubre y noviembre, periodo en el que los bancos apoyaron con una serie de medida a los clientes que se vieron afectados” finalizó Villalobos.