El artista, que trabaja en el arte desde 2012, encontró en el acero su nueva materia prima. La plaza Calleja y el parque El Arenal resguardan dos de sus obras y, desde el 24 de marzo, La revolución de las pititas estará a los pies del Cristo Redentor

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18 de febrero de 2020, 3:00 AM
18 de febrero de 2020, 3:00 AM

Dos de sus obras están emplazadas en lugares icónicos de la ciudad y desde el 24 de marzo una tercera, con una fuerte carga de simbolismo, estará a los pies del Cristo Redentor, bajo el nombre La revolución de las pititas. Para Carlos Fernando Paz Medina, la relación con el arte es parte de su vida, pero fue entre 2012 y 2013 que decidió trabajar seriamente con él, dedicarle más tiempo y buscar lugares para mostrarlo.

El año pasado ganó el Concurso Centro Poético de Sud América con su obra Yo soy un río de pie. Esta se encuentra en la remodelada plaza Calleja. Con esa escultura en metal, el trabajo creativo de Paz pasó a formar parte de la magia que acompaña a las noches de poesía de ese lugar.

Otra de las obras del autor interviene el paisaje del parque El Arenal, desde hace dos meses. Llamada por el escultor La Tamborita, el conjunto de figuras en acero muestra a una institución de la cultura musical del oriente. “Esta obra es la propuesta de nuevas técnicas materializadas en objetos, porque sus contornos se distinguen solo desde un punto de vista, después se convierte en filamentos que básicamente no tienen sentido”, describió el autor.

La Tamborita es una de las obras ganadoras de la XXI Bienal Internacional de Arte y fue presentada el sábado 15 de febrero en el espacio donde estará de forma permanente, porque entre las premisas del concurso estaban intervenir espacios públicos y tocar temas locales.

“Estas obras de arte, que forman parte del paisaje urbano, están ahí para que toda la población las disfrute, las visite y se adueñe de ellas”, sostuvo María Renée Canelas, directora general de Cultura y Turismo del municipio.

Sobre el artista

La conexión de Paz con lo cruceño inició en 1985, cuando llega a Santa Cruz desde su natal La Paz. Siendo aún adolescente, la ciudad le mostró nuevas amistades, retos y paisajes de los que tendría que ser parte y tratar de reflejarlo de alguna manera, indicó Paz.

En 1993 comienza la carrera de Arquitectura y Urbanismo en la Universidad Privada de Santa Cruz de la Sierra (UPSA). Años después, la experimentación por más de 10 años con los números hizo que logre su primera exposición en el Centro de la Cultura Plurinacional (CCP), fue en abril de 2014.

En esta primera faceta presentó arte fractal, un arte matemático que él desarrolla con ayuda de un ordenador. “Esos fueron mis primeros cuadros, que salían de la computadora, a las que yo iba poniéndole color también matemáticamente”, explicó el artista.

Desde hace tres años, a sugerencia de Juan Bustillos, Paz empezó un idilio con la escultura, tomando el metal como materia prima. “Me interesé en trabajar primero con el bronce y en este último año, porque lo requerían mis diseños, inicié mi trabajo con el acero”, detalló Paz sobre sus esculturas.



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