Pekín pone calda al fuego de la guerra comercial con nuevos aranceles por 75.000 millones de dólares. Washington respondió con un incremento del 15 y 30% a los productos chinos, en dos nuevas rondas

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24 de agosto de 2019, 4:00 AM
24 de agosto de 2019, 4:00 AM

China anunció ayer su intención de imponer nuevos aranceles a bienes importados de Estados Unidos con un valor comercial de 75.000 millones de dólares. En respuesta, Trump subió a un 15% arancel a bienes chinos por 300.000 millones de dólares desde septiembre.

El nuevo episodio de la guerra comercial desató una fuerte turbulencia en los mercados internacionales. Estas tarifas adicionales evolucionarán en un intervalo de entre el 5 y 10% y se aplicarán a 5.078 productos estadounidenses en dos fases -el 1 de septiembre y el 15 de diciembre-, precisaron las autoridades chinas encargadas de los derechos de aduana.

Pekín también anunció que impondrá una tarifa del 25% a los automóviles procedentes de Estados Unidos y un 5% a las piezas sueltas a partir del 15 de diciembre.

La escalada de la guerra comercial entre las dos mayores potencias económicas del mundo se añade a los crecientes temores de una posible recesión en Estados Unidos, con los aranceles pesando en el comercio global y el crecimiento de ambos países.

El presidente estadounidense, Donald Trump, ha impuesto nuevos aranceles a bienes importados del gigante asiático con un valor comercial de 250.000 millones de dólares, y aplicará tarifas aduaneras adicionales sobre productos chinos por un valor total de 300.000 millones de dólares, en dos nuevas rondas: el 1 de septiembre y el 15 de diciembre.

El incremento de las tarifas por parte de Washington “ha llevado a una continua escalada de las fricciones económicas y comerciales entre China y Estados Unidos, violando el consenso alcanzado por los dos jefes de Estado en Argentina y en Osaka”, afirmó en un comunicado el Gobierno chino.

Respuesta inmediata

“A partir del 1 de octubre, los 250.000 millones de dólares de bienes y productos procedentes de China, que actualmente están gravados con un 25%, estarán gravados con un 30%”, dijo Trump en su cuenta de Twitter. Además, el mandatario informó de que los 300.000 millones de dólares restantes de importaciones chinas, que estaban sujetas a partir del 1 de septiembre a aranceles del 10%, ahora estarán gravadas con un 15%.

En meses previos, China había levantado las medidas punitivas contra ambos tipos de bienes como gesto de buena fe a la espera de resultados en las negociaciones comerciales en marcha. El Dow Futures, que ofrece un fuerte indicativo de la apertura del índice Dow Jones de Wall Street, en verde antes del anuncio de China, se hundía en número rojos antes de la apertura oficial del parqué.

Trump se proclamó “el elegido” defendiendo su guerra comercial contra China, e indicó que era su “destino encargarse de Pekín”. La semana pasada, una alarma saltó en el mercado de bonos del Tesoro estadounidense cuando la rentabilidad del bono a 10 años cayó brevemente por debajo de la rentabilidad del bono a dos años - lo inverso de lo que normalmente ocurre.

Responsables de Estados Unidos han dicho que las negociaciones comerciales con China continuarán en encuentros cara a cara el mes próximo.

Por su parte, el portavoz del ministerio de Comercio chino, Gao Feng, dijo el jueves no estar informado de cuándo comenzaría la siguiente ronda.

Los dos gigantes económicos se desafían a diario con reproches y críticas relativos a áreas cada vez más amplias: del comercio bilateral a disputas territoriales en el mar del sur de China, las protestas en Hong Kong o las acciones de Estados Unidos contra el fabricante tecnológico Huawei.