El hecho sucedió en los EEUU. Una pareja logró reunir el monto en una campaña en internet bajo la promesa de comprar una casa, un auto y cambiarle la vida

El Deber logo
27 de agosto de 2018, 7:14 AM
27 de agosto de 2018, 7:14 AM

Esta historia comenzó en octubre de 2017, cuando una mujer llamada Kate McClure que se encontraba transitando una carretera en Filadelfia quedó varada porque su vehículo no tenía combustible. Entonces, Johnny Bobbit, un indigente y veterano de guerra, decidió usar los últimos 20 dólares que le quedaban para comprar gasolina y ayudar a la conductora en apuros. 

Para agradecer la ayuda, McClure y su novio, Mark D'Amico lanzaron una campaña en GoFundMe (una web de recaudación de fondos) para reunir dinero con el que se podría cambiar la vida de este hombre. 

Esta era la promesa de la pareja: Lo primero en la lista es un NUEVO hogar que será de posesión de Johnny. ¡Nunca más tendrá que preocuparse de poner un techo sobre su cabeza! Lo segundo será el coche soñado que siempre ha querido... un Ford Ranger de 1999 (sí, lo digo en serio). También habrá dos fideicomisos establecidos en su nombre, uno que le dará la posibilidad de cobrar un pequeño “salario” cada año y otro fideicomiso de jubilación que será sabiamente invertido por un planificador financiero al que tendrá acceso en un periodo de tiempo con el que se sienta cómodo para que cuando llegue el momento pueda vivir su sueño de jubilarse con trozo de tierra y una cabaña en el campo. Se le asignará una cuenta bancaria con fondos para cubrir las necesidades diarias que le ayudarán hasta que encuentre un trabajo. Y, por último, donará a algunas organizaciones y personas que en los últimos años lo han ayudado a superar este momento difícil de su vida.

La campaña fue un éxito. McClure y D'Amico lograron reunir 402.706 dólares, según informa el diario The Inquirer, pero el dinero lo prometido no se cumplió.

En vez de la vivienda se conformaron con comprar una casa rodante, también conocida como caravana en los Estados Unidos, nunca tuvo acceso 'sueldo' anunciado o la creación de un fideicomiso. La pareja asegura haberle dado gran parte del dinero, pero Bobbit sigue viviendo en la calle.

Lo que si cambió fue la vida de McClure, que se compró un BMW y pagó unas jugosas vacaciones en Los Angeles, Florida y Las Vegas, donde su novio incluso llegó a hacer apuestas con parte del dinero recaudado.

En una de sus últimas declaraciones dijeron que solo le darán el dinero a Bobbit cuando este deje de consumir drogas y esté totalmente sobrio, ya que darle un monto de esta naturaleza equivaldría a entregarle un arma cargada.

La web que posibilitó las donaciones ya inició una investigación, mientras que dos abogados decidieron iniciar una representación legal para que el dinero cumpla el fin prometido a los miles de donantes que aportaron en la campaña.