La vicepresidenta de Banca Pyme del Banco Mercantil Santa Cruz habla de su trayectoria en las diferentes áreas financieras. El grupo inaugura su torre en octubre

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7 de julio de 2019, 3:00 AM
7 de julio de 2019, 3:00 AM

Pocas personas pueden decir que han hecho toda su carrera profesional en una sola empresa. Cristina Roca es una de ellas. Desde que iniciara sus prácticas empresariales hasta llegar a ocupar la vicepresidencia de toda una unidad de negocios, Cristina ha desarrollado su talento y lo ha puesto al servicio de una sola institución: el Banco Mercantil Santa Cruz.

Han transcurrido más de 22 años desde que la llamaron del banco para ofrecerle una posición en Créditos de Consumo. Su dedicación y capacidad de trabajo en equipo le valieron promociones laborales en diferentes áreas del banco: fue ejecutiva de Banca Personas, oficial de créditos de Banca Empresas y gerente de las agencias Equipetrol, oficina central, zona sur y regional oriente de manera escalonada. En enero de este año la designaron vicepresidenta de Banca Pyme.

“Nunca tuve miedo para encarar nuevos retos porque hubo gente que me formó y me apoyó para ello”, dice Cristina recordando a sus mentores. Afirma que la vocación de servicio es fundamental para una institución financiera. “Si uno no está preparado para atender al cliente como se debe, ese no es tu lugar”, añade.

Cristina Roca considera que el Banco Mercantil Santa Cruz ha mantenido invariable su compromiso por Bolivia y su gente en sus diversas etapas. La institución es el resultado de la fusión del Banco Mercantil y del Banco Santa Cruz, que significó la compra del paquete accionario que el Grupo Santander mantenía en el segundo desde 1998. Así se conformaría el banco más grande del país en términos de activos. En 2017, el BMSC se fusionó con el Banco Los Andes, de capitales alemanes. Ella ha sido testigo de estas transformaciones en las que siempre prevaleció la apuesta por lo nacional.

En la actualidad, el grupo financiero se ha diversificado en empresas aseguradoras, de warrant y en el retail, con el Centro Comercial Las Brisas. Roca explica que cada empresa se maneja de manera independiente. En octubre el grupo espera inaugurar su anhelada torre empresarial, adyacente al centro comercial. “Vamos a trabajar allí en distintos ámbitos empresariales, pero todos enfocados en brindar bienestar para los clientes y en potenciar Bolivia”, afirma.

 

Pyme, una banca diferente

Su designación como vicepresidenta de Banca Pyme le planteó un nuevo reto profesional. Tras un manejo de cuentas en el esquema tradicional, ahora le tocaba “dar un vuelque total” para aprender a manejar una banca independiente. Atender a la pequeña y a la mediana empresa requiere de mucha agilidad. “Los créditos que damos a los emprendedores son muy rotativos y rápidos”, señala. “El cliente necesita el dinero a la brevedad posible para emprender un negocio o para potenciar su capital operativo; es una banca que demanda mucho dinamismo”. En general, califica como muy grande al sector pyme, aunque “hay que formalizar a algunos clientes, bancarizarlos e irlos guiando para que sus negocios sean exitosos”.

Parte de su desafío radica en la cantidad de personas que ahora tiene a su cargo. “Yo pasé de manejar un equipo de 80 personas a uno de 250. Organizándose y dándole un toque diferente, uno puede cumplir las metas que se proponga”, argumenta.

Si bien no es muy común que haya mujeres al mando de equipos tan grandes, Cristina Roca destaca que ha habido avances significativos en cuanto a equidad de género. La participación femenina en la fuerza laboral del sector se aproxima al 50% gracias a que ellas ahora tienen una formación más exigente, según su apreciación. Cree que la mujer marca la diferencia no por poseer un sexto sentido, sino porque sabe establecer una empatía con sus equipos de trabajo: “Es importante escuchar al personal; estamos aquí no solo para cumplir metas, sino para tener el mejor ambiente de trabajo”.