Gustavo Santos Vargas, autor confeso de asesinar y descuartizar a una familia de bolivianos la noche de Navidad de 2018 en Brasil, fue capturado este fin de semana en Santa Cruz 

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11 de febrero de 2019, 15:09 PM
11 de febrero de 2019, 15:09 PM

La abogada de la familia asesinada y descuartizada en Brasil, Patricia Vega, señaló el lunes que el autor de ese delito, que fue detenido en la víspera en la ciudad de Santa Cruz, podría ser sentenciado a 90 años de cárcel en Brasil, por una condena acumulada.

"En Brasil, al igual que en Bolivia, la pena máxima por un delito es de 30 años, pero a diferencia de lo que pasa en este país es que allá él puede recibir una sentencia por el asesinato del padre, otra condena por feminicidio por la muerte de la madre y otra pena por la del niño y al final estas se acumulan", dijo antes de abordar un avión con destino a Sao Paulo, para tramitar el traslado del criminal confeso.

Según las normas de Brasil, la máxima condena por asesinato es de 30 años y las sentencias son acumulables.

En la víspera, el autor de los crímenes ocurridos entre el 22 y 25 de diciembre, Gustavo Vargas, fue detenido por la Policía en una vivienda de la villa Primero de Mayo, de la ciudad de Santa Cruz.

Vega dijo que también se está viendo la situación de otros dos cómplices que ayudaron a Vargas en su intento de deshacerse de los cuerpos, que están detenidos en Brasil.

"Me debía dinero", dijo el hombre el sábado cuando fue presentado ante los medios de comunicación. "Nadie sabía nada de lo que hice; al niño lo maté dos días después de haber matado a sus padres. No sabía qué hacer, lloraba mucho y preguntaba por sus padres".